Arde x Arde | Centro Cultural de la Cooperación

Arde x Arde

12/12/2011

El 19y20 nos encontró con los sentidos bien abiertos, con nuestros cuerpos comprometidos. Con la consigna, vos lo viviste, no dejes que te lo cuenten, comenzamos a plasmar en acciones nuestra impronta, apoyando cada ocupación, repudiando cada desalojo, denunciando impunidad, exigiendo justicia, trabajo, gestando un espacio para otra cultura, valiéndonos de los medios del arte, más que para enunciar/denunciar, para interpelar, señalar e inquietar. En ese interjuego simbólico se proponía crear un intermedio, espacio de construcción simbólica que nos modificase en tanto integrantes de un conjunto. Espacio para salir de la urgencia inmediata de los vasallajes del poder.

De esa urgencia que desconecta, que desarma, que empuja hacia la descarga inmediata, sin posibilidad de proyección ni de empoderamiento.

Ya estábamos presentes desde antes, entonces la cuestión era resignificar nuestra circulación, crear, incluir, transformarnos en el camino. Momentos oportunos para asumirnos en tanto sujetos deseantes y reconocernos con otros. Deseos colectivos conjugados, potenciados.

Arde! actúa con el combustible de las asambleas barriales, las fábricas recuperadas, los movimientos que luchaban por trabajo y los que lo hacían por trabajar menos para-trabajar-todos, los espacios tomados para la vida y la cultura popular. Desde allí es desde donde producíamos, con espíritu de apertura y con ansias de multiplicar, con otros grupos con quienes íbamos a la par que discutíamos acerca de nuestras prácticas, intentando concebir de una forma más autogestiva, colectiva, sin restricciones, con total libertad.

Podemos decir que nuestros procesos creativos eran tan caóticos como potenciadores. Las intervenciones nacían desde ideas que eran puestas en juego, e iban asumiendo distintas formas. Ese proceso continuaba en la acción, es decir que salíamos a plantear propuestas que finalmente tomaban su forma definitiva en la interacción.

Problematizar el espacio del arte y analizar nuestra situación en él era una constante del debate interno. Esto nos habilitó a responsabilizarnos en determinados posicionamientos. A través de los numerosos encuentros, una suerte de taller semanal de artes visuales y gastronomía, el grupo fideos, planteábamos deconstruir proposiciones aparentemente cerradas acerca del lugar de la acción política, la creación artística en la sociedad, los espacios institucionales y el arte en la calle. Consideramos que la producción simbólica implica un posicionamiento ético asumido o desconocido. Nuestra intuición fue ocupar un lugar que abandonara moldes y patrones políticos y culturales instalados. En esta línea nos propusimos en tanto sujetos involucrados con las distintas realidades socio culturales a las que pertenecemos.

¿Por qué realizar esta muestra a 10 años del 19y20? ¿Para historizar?, ¿para dejar por fin un registro institucional?, ¿para conmemorar emociones vividas? No, no solamente, aunque esos ejercicios son tan interesantes e intensos cuando se realizan desde un reencuentro activo. Intentamos una transmisión, parcial claro, pero constructiva.

Nuestro paso por Arde! no fue sin consecuencias. Al grupo lo conformamos muchas personas que participamos más o menos tiempo, pertenecientes a distintas prácticas o espacios. Lo que sí fue un denominador común fue la implicación vital y desde allí es que la experiencia de Arde! nos modificó y sentimos esa potencia transformándonos con otros. A partir de aquí es que esta muestra nos interpela. A lo largo de estos 10 años, muchos con experiencias de militancia previa al 19y20, otros posteriores, la sensación colectiva es de haber transitado distintos espacios a partir de un compromiso activo.  No perder la visión crítica y transformadora, revisar también el presente y apropiarnos de los espacios de circulación… ¿es solo historización? Revisamos críticamente lo transitado y planteamos un recorrido para que quien lo transite pueda reconocerse en acción. Lo que se muestra habla también de conflictos actuales, invita a dar bola a los crímenes sociales del presente, a ver las continuidades de estas prácticas en otras luchas contra el desalojo del sentido y por ocupar espacios para la vida y la creación colectivas.

Daniel Sanjurjo, Federico Mañanes, Javier del Olmo, José Luis Meirás, Leandro Gorrini,  Natalia Revale, Paula Zambelli, Silvina Bernasconi.

Compartir en

Añadir nuevo comentario

Image CAPTCHA